Por Alejandro Tovar Luna
Número 25
Muchos columnistas
y analistas políticos (a los cuales se les respeta por su
incansable tarea de investigación en el área) en ocasiones
"arremeten" contra los sujetos en sus espacios de opinión.
México, desde la reciente aprobación de la reforma
fiscal, se encuentra en un debate que, quizás, durará
algunos meses y que podría traer algunas consecuencias en
materia jurídica por los amparos y diversas acciones legales
que empresas (e incluso personas físicas) están tomando.
Para situar un poco en contexto,
en México recientemente se aprobó una reforma fiscal
que se necesitaba con "urgencia", según mismas
opiniones de los líderes políticos y financieros del
país. El debate se desarrolló durante la mayor parte
del 2001 y se enviaron algunos documentos a las cámaras de
diputados y senadores para comenzar a elaborar esta nueva política
fiscal.
En una de las primeras columnas
de Palabra TI (específicamente en la segunda intervención)
señalábamos la gran disposición de la nueva
administración en México para la implantación
del proyecto eMéxico1
en el cual se contemplaban importantes inversiones de capital e
impulsos a las Tecnologías de la Información en la
República Mexicana. Una de las premisas del proyecto eMéxico
era el fomento de una cultura digital (ya ampliamente difundida
en algunos sectores privilegiados de la sociedad) y de la vinculación
con Internet y nuevas tecnologías de información.
En esa misma intervención comentábamos de la intermitencia
del proyecto debido a recortes presupuestales y adecuaciones monetarias
para continuar con los objetivos del gobierno federal. Hoy en día,
tras la reciente entrada en vigor de los nuevos impuestos en la
industria de las TI, el proyecto eMéxico se
ve más ahogado que nunca.
Situándonos en una perspectiva
netamente empresarial, y para hacer un símil del estado actual
de eMéxico, una de las primeras áreas
que se ven afectadas por ajustes de presupuesto o por crisis externas
es el ámbito del desarrollo de la infraestructura tecnológica.
Hoy en día, ante los escenarios planteados, una empresa busca
realizar ajustes en las divisiones que se pueden considerar de segundo
grado para lograr mantener los presupuestos y objetivos establecidos
a principios de año; en materia del estado mexicano las acciones
antes citadas encajan perfectamente en lo que hoy se está
haciendo.
Entendemos que se deben dar impulsos
a otros sectores prioritarios como la educación, infraestructuras,
comunicaciones nacionales, etc., sin embargo el desarrollo y acercamiento
de la sociedad a las TI también forma parte del crecimiento
sostenible del país.
Uno de los principales frenos que
se pueden presentar a la adquisición de computadoras personales
(PC's) en los hogares, son los nuevos impuestos a los productos
tecnológicos. Incluso los accesos a Internet, según
se ha difundido, se ven afectados por estos gravámenes que,
desafortunadamente, golpean la producción de los diferentes
activos del mercado y disminuyen la demanda de los productos al
afectar el bolsillo de los consumidores finales (esto sin mencionar
a los productores, distribuidores, ensambladores y vendedores minoristas).
La nueva imposición de un
impuesto al acceso tecnológico se traduce en disminución
de los instrumentos para interactuar con medios como Internet, la
contradicción entre impulso tecnológico y los impuestos
a los diferentes elementos chocan con lo expuesto durante los postulados
iniciales de eMéxico. Se han efectuado algunas
protestas contra las nuevas disposiciones; Organizaciones no Gubernamentales
(ONG's) como la AMITI -Asociación Mexicana de Tecnologías
de Información, <http://www.amiti.org.mx>-
declaró recientemente su rechazo a la reforma fiscal aseverando
que el impulso de acceso tecnológico que poco a poco México
estaba consiguiendo, se vería detenido.
En España, este año,
la Asociación de Internautas (AI) ha lanzado un reclamo al
Ministerio de Ciencia y Tecnología en el cual se exige la
completa implantación de la línea ADSL2
en la península. España busca ser, el primer país
de la Unión Europea (UE) en la cual todos los habitantes
de las diferentes poblaciones puedan tener acceso a las velocidades
de hasta 2MB (dos mega bits por segundo) en la navegación
en Internet. Lo anterior se traduce en contar con una velocidad
35.71 veces más que un usuario común que se conecta
con un módem de 56ks (cincuenta y seis kilo bytes por segundo).
La AI de España asevera que no se han cumplido las fases
de implantación de la tecnología ADSL marcadas en
la orden ministerial que la regulaba. En el comunicado publicado
las semanas pasadas en El País <http://www.elpais.es>
a través de su departamento tecnológico de Ciberpaís,
la AI pide los datos en que Telefónica de España
(<http://www.telefonica.es>),
la empresa que controla el mercado de telefonía en España,
está obligada a presentar al ministerio sobre acceso a Internet
las centrales en las cuales es posible la instalación de
ADSL, así como una solución para conseguir una tarifa
plana de acceso3.
Como era de esperarse, el contar
con alta velocidad en la red, tendrá un costo extra al acceso
dial-up (telefónico). Los últimos datos de Telefónica
de España oscilan entre los 45.08 Euros mensuales
(aproximadamente unos $379 pesos mexicanos) por contar con ADSL.
Los datos anteriores resultan muy reveladores en cuanto a las bajas
cifras que se cobran por el servicio. A pesar de las quejas de la
AI, en las cuales, como ya revisamos, demandan un total respaldo
a los cibernautas, el número de usuarios con ADSL está
creciendo de importante manera, con lo cual se incrementarán
los acceso a Internet y la industria de las TI tendrán beneficios
inmediatos gracias que los usuarios podrán saltar de un lugar
a otro en Internet de manera eficaz y veloz.
La reflexión y comparativa
anterior entre las demandas de la AI de España y la reforma
fiscal en México, son los polos opuestos en cuanto a respaldo
de infraestructura tecnológica que se ofrecen en ambos países.
Por un lado en México el proyecto eMéxico
se ha visto frenado por los puntos ya discutidos mientras que en
España asociaciones civiles demandan una optimización
del servicio y que el estado intervenga directamente con el proveedor
del servicio principal (Telefónica de España).
Desafortunadamente los planteamientos
realizados en esta intervención revelan el severo atraso
en impulso tecnológico que existe en un país como
México ante un escenario de un país en el cual se
está tratando de incrementar los recursos para que los usuarios
puedan ser agentes activos de la nueva economía. Con todo
esto no insinuamos que la administración mexicana tome acciones
como en España (aunque cabe destacar que en México
ya se ofrecen servicios de tecnología ADSL). Simplemente
es un símil de la, todavía, amplia brecha de desarrollo
tecnológico que existe en el mundo; pero, también,
es importante destacar que existen prioridades en el entorno social
como una recaudación fiscal adecuada.
Notas:
1
Para mayor información del proyecto eMéxico visite
el site del proyecto: <http://www.e-mexico.gob.mx>
2 Línea ADSL corresponde
a la denominación de Internet de Alta Velocidad a través
de cable. Para mayor información, sugerimos visitar el site
de la información especializada de Telefónica, www.telefonicaonline.com
3 La tarifa plana se considera
como un cobro único por acceso sin importar el tiempo de
conexión ni la hora del día.
Alejandro
Tovar Luna
Alejandro Tovar Luna es Licenciado en
Ciencias de la Comunicación por el ITESM
- CEM. Actualmente estudia el Master en EBusiness (MeB) en la
Universidad Pontificia
de Comillas, Madrid, España. |