Por Alejandro Tovar Luna
Número 29
Las reglas y fundamentos
de la economía buscan un equilibrio en cuanto a los agentes
que participan dentro de ella. Si lo vemos desde un punto de vista
vía modelos econométricos, es imperante una interdependencia
de las partes así como la paridad de las fuerzas que se encuentran.
Legislativamente hablando, América
Latina aún presenta muchas carencias para dar certidumbre
e impulso a Internet como agente económico activo. La golpeada
industria de las punto-com & comercio electrónico no
pueden replantear sus modelos de negocio al 100% sino se cuenta
con la seguridad por parte del mercado que no serán defraudados.
Aunque la ruptura de la burbuja
de Internet golpeó a las todas las regiones económicas
(Asia, América Latina, Unión Europea, Norte América,
etc.) es destacable que cada una de ellas ha reaccionado de diferente
manera frente a la crisis. Una de las principales estrategias, sobre
todo de la Unión Europea y de Norte América - excluyendo
México - ha sido la identificación electrónica.
El ID electrónico es una
realidad ya en la Unión Europea, en Estados Unidos y Canadá.
Esto se traduce en la expedición de un "carnet electrónico"
(por llamarle de alguna manera) en el cual se encuentra toda la
información propia de cada cibernauta. Consta de un número
de identificación único que se encuentra conectado
a una base de datos que a su vez establece comunicación con
las empresas que incorporen la modalidad de autenticación
electrónica en sus ventas a través de Internet.
Por sencilla que parezca este planteamiento,
la identificación electrónica se ha convertido en
un agente que ha dado un alto grado de seguridad y poco a poco está
tratando de reactivar la industria de las punto-com. Con esto no
asevero que se reactivará en su totalidad el área
de B2C o de e-commerce. Simplemente se trata de un pequeño
paso para plantear el camino en el cual se pueda hacer rentable
la industria.
¿Cuáles son las ventajas
de la identificación electrónica? Los usuarios aseguran
a través de un número confidencial y de único
acceso a ellos que sus datos estarán protegidos. A su vez
las empresas que cuenten con este proceso de certificación
de dicho ID-e cuentan con poderosas herramientas inteligentes donde,
a través de un proceso seguro y cifrado, se identifica a
los cibernautas. España, Alemania y Reino Unido son los tres
países que cuentan con mayor legislaciones, aplicaciones
y afiliados a este modelo.
Es claro que la infraestructura,
específicamente de aplicaciones, juega un papel fundamental
para lograr todos estos objetivos. Sin embargo la legislación
en materia de tecnologías propia de cada región es
el detonante fundamental para otorgar el respaldo necesario a este
tipo de iniciativas.
América Latina debe comenzar
a formar alianzas en el rubro tecnológico para poder hacer
frente a las necesidades de la industria. Se pueden aprovechar perfectamente
los avances existentes en materia de cooperación económica
para buscar formar un frente que esté dedicado a la certificación
electrónica, pues la comunicación que existe entre
los diferentes agentes de Internet de la región es amplia.
Un buen comienzo puede ser el fusionar o integrar una asociación
de internautas de América Latina o bien de habla hispana
que pueda abanderar el proyecto y persuadir para que se establezca
algún tipo de acuerdo para lograr el ID-e.
Con algunas iniciativas como esta
la industria puede comenzar a reactivarse y en verdad hacer que
despegue hacia una rentabilidad que se vuelva palpable y tangible
para los usuarios y para todos aquellos que aún visualizamos
a la red como un agente económico de peso dentro de la globalización
capitalista que vivimos hoy en día.
MeB.
Alejandro Tovar Luna
Consultor en e-business. |