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Por Olga Suárez,
Claudia Ruíz, Luis Carlos Hincapie y Eva Cecilia Mendoza
Número 23
Introducción
Con base en elementos de la teoría general de sistemas, de
la comunicación organizacional y de la intersubjetividad,
entendida como la posibilidad de construcción de sentido
y de dinamización de procesos de interacción entre
los individuos y los grupos, el presente estudio, apoyado en una
investigación de campo sobre la comunicación informal
en tres organizaciones, plantea la posibilidad de mirarla como un
elemento a tener en cuenta en la nueva organización que se
está gestando bajo los conceptos de conocimiento, aprendizaje,
interdependencia, trabajo en equipo, apertura y colaboración
espontánea.
Presentación
El propósito de la
investigación fue estudiar la comunicación informal,
desde la praxis de los individuos y a partir de su relación
con la intersubjetivad y la construcción de sentido, fenómenos
presentes en la vida cotidiana de la organización que permiten
dinamizar sus actividades y fomentar las relaciones de interdependencia
del sistema. Asimismo, aplicar la etnometodología como una
herramienta novedosa en el campo de la investigación en comunicación
organizacional.
Elementos conceptuales
En las teorías administrativas y de la organización,
la comunicación informal se define generalmente como flujo
de información que circula por los diferentes ámbitos
de la organización, y expresa la tendencia humana a interactuar,
a establecer relaciones sociales que propician una comunicación
más práctica, protegen al individuo de la soledad
y del anonimato y le permiten desarrollar percepciones contínuas
sobre su rol y el del grupo al que pertenece.
Las organizaciones admiten la presencia de la comunicación
informal, pero no la consideran como un factor dinamizador en las
relaciones de interdependencia, porque, si bien puede ser una herramienta
para medir el clima de una empresa, también puede ser una
cadena de informaciones susceptible de convertirse en ruido o en
rumor.
El estudio plantea la posibilidad de mirar la comunicación
informal, desde la percepción cotidiana que tienen de ella
los individuos en la organización y desde los conceptos de
la intersubjetividad y la construcción de sentido.
La organización se considera en el estudio como un sistema
social abierto, como un organismo vivo y dinámico fundado
en el principio de la interacción. Entendida así,
la organización puede admitir a los individuos y a los grupos
que conversan como la esencia de esas relaciones de interdependencia
e interacción sin las cuales no podría conseguir sus
objetivos ni satisfacer las necesidades de la sociedad.
La comunicación como fenómeno intersubjetivo está
presente en las interacciones de los sistemas formal e informal
y hace posible que la mirada que se le ha dado al comportamiento
comunicativo de las personas en la organización, pase de
una simple proyección de la estructura a la elaboración
colectiva, a una red múltiple de relaciones.
La intersubjetividad es un principio de experiencia compartida,
de desarrollo del sentido común, de conversación,
ofrece la posibilidad de transformar, de aprender, de construir
sentido, de asimilar la cultura de la organización. Mariluz
Restrepo afirma que "La comunicación es conversación,
es la posibilidad de generar un diálogo, capaz de abrir sentidos,
de transformar y no necesariamente de generar consenso"1.
Para la finalidad del estudio, la intersubjetividad se expresa en
lo que hablan los individuos acerca de su trabajo o de su rol, por
ejemplo, del discurso tópico se infieren las posiciones morales
e intelectuales de una colectividad, la percepción de sus
contextos y, por lo tanto, los estados de conciencia de los individuos
y de los grupos en una organización.
La construcción de sentido es también un proceso cotidiano,
es una experiencia a la vez individual y colectiva de percibir la
realidad y de entenderla. Según Lonergan2
se habla de construcción de sentido como aquel proceso en
el que los individuos desarrollan el sentido común o la noción
del nosotros. Se manifiesta en procesos prácticos básicos
de colaboración espontánea y trabajo, de comunicación
y de toma de decisiones. En dicho proceso los individuos que interactúan,
vivencian tres niveles: la aprehensión, la afección
y el sentido.
La aprehensión depende de los esquemas de experiencia de
los sujetos (sensaciones, imágenes, movimientos corporales)
que implican atención, interés, dirección y
esfuerzos variables. En el nivel de Afección los individuos
asumen sus roles y realizan acciones espontáneas. Aquí
se manifiestan, tanto la intersubjetividad como el sentir individual
y el del otro. En el nivel de Sentido hay apropiación de
conceptos, de realidades y situaciones y se opta por una posibilidad
que va incluso más allá del sentido de la propia realidad,
se presenta el consenso y se aceptan las posiciones individuales.
Base metodológica
Con el ánimo de explorar estos elementos teóricos
en el ámbito de las organizaciones, se consideró que
la investigación etnometodológica era una alternativa
consecuente con los propósitos del estudio, facilitaba la
exploración dentro de la organización y dentro del
mismo grupo de investigadores, es decir, hacer y verse haciendo,
dado que los investigadores forman parte de las organizaciones investigadas.
Para Mauro Wolf "la etnometodología es el estudio de
los modos en que se organiza el conocimiento que los individuos
tienen de los cursos de acción normales, de sus asuntos habituales,
de los escenarios acostumbrados"3
Para sistematizar e interpretar la información recopilada
se utilizaron elementos de la investigación cualitativa como
la exploración, los mapas y las lecturas.
Según Galindo4
la exploración es el acercamiento a la vivencia, para el
cual se empleó la conversación. Los mapas fueron el
medio para registrar y sistematizar la información, para
representar el discurso tópico de los sujetos, e ilustrar
los ámbitos en los que se desarrollaron los procesos. La
lectura es la significación, el análisis y, ante todo,
elaboración de sentido. La significación elegida es
una alternativa entre muchas posibilidades, pero cobra validez en
la medida en que está guiada por el marco teórico
y la posición asumida por los investigadores.
Procedimiento
La investigación se realizó en tres organizaciones
de las cuales hacían parte los investigadores; dos del sector
educativo: una privada y otra oficial y la tercera del sector industrial
privado. No se pretendía un estudio comparativo por organizaciones,
sino un acercamiento a la comunicación organizacional desde
los diferentes ámbitos propuestos.
Se realizaron dos procesos de exploración: uno sobre cómo
se comunican los sujetos en la organización, y otro de construcción
de sentido en grupos formales e informales, ambos como experiencias
libres y espontáneas.
Primer proceso: exploración
de la comunicación de los sujetos en la organización
Se realizaron 40 conversaciones en las tres organizaciones, con
personas de diferentes jerarquías y niveles educativos, para
obtener elementos de la cotidianidad y del sentir espontáneo
de los individuos sobre cómo, por qué y para qué
se comunican en la organización; los temas, los momentos
y los espacios de comunicación formal e informal. Para sistematizar
la información obtenida se elaboraron mapas de comunicación
por individuo que alimentaron la lectura de tendencias de la comunicación
en la organización.
Segundo proceso: Construcción
de sentido
En este proceso se identificaron cuatro grupos, uno por cada investigador
(dos formales y dos informales).
A partir de la intersubjetividad compartida por grupos formales
e informales se buscaba vivenciar la construcción de sentido
en tres fases: primera exploración individual, intersubjetividad
en grupo y segunda exploración individual.
Primera exploración individual: cada sujeto habló
sobre un hecho o evento que lo hubiera afectado dentro de la organización.
En su discurso se exploraron los tres niveles básicos de
la intersubjetividad: el decir que revela los esquemas de experiencia
del sujeto, lo que sabe; el sentir o manera como el hecho afecta
al sujeto y el hacer o toma de decisiones y comportamientos.
Intersubjetividad en grupos: En esta fase el decir, el sentir y
el hacer individuales se socializan en el grupo y como experiencia
compartida se evoluciona a los niveles de aprehensión, de
afección y de sentido. A diferencia de la primera fase, donde
se hace una reflexión intrapersonal, en esta fase se hace
una reflexión interpersonal. El grupo dinamiza, analiza,
establece acuerdos, se aportan nuevos elementos que son discutidos
y posibilitan la construcción de sentido.
Segunda exploración individual: se verifican las modificaciones
de sentido generadas por la intersubjetividad grupal y se evalúa
la dinámica como tal desde la percepción de los participantes.
La información obtenida en las tres fases fue recopilada
a través de mapas que alimentaron la lectura de construcción
de sentido en la organización (ver gráfico No. 2)
Conclusiones
La comunicación informal en la organización puede
mirarse a partir de niveles de intersubjetividad, es decir, desde
las interacciones que ella propicia: los momentos, los espacios,
la frecuencia, las personas con las que se comparte cotidianamente,
y entre quienes se cultivan relaciones de confianza. Si bien la
comunicación informal facilita la intersubjetividad no se
establece entre ellas una relación de causa efecto.
La comunicación informal se produce de manera espontánea
y no obedece a patrones de comportamiento establecidos por la organización,
es reconocida por los sujetos indagados como una forma básica
de conocimiento del otro, de incorporar información de carácter
situacional (quién es, qué hace)
La intersubjetividad, por su parte, necesita de otros elementos
(información cualitativa del otro, información sociológica,
información cultural, entre otras) que la hacen definitiva
en el ámbito de la construcción de sentido.
La construcción de sentido requiere mayores procesos intersubjetivos,
y por ende mayor capacidad de los sujetos para integrar, relacionar
y procesar sus propias motivaciones, sus sentires y sus estados
de conciencia. Cuando la construcción de sentido genera cambios
de actitud frente al quehacer cotidiano se ha trascendido a un nivel
que podría compararse con el aprendizaje.
Elementos como el conocimiento mutuo, la empatía, las relaciones
de confianza, la cooperación espontánea presentes
en la comunicación informal, favorecen los procesos de intersubjetividad
y agilizan la construcción de sentido: en la investigación
se evidenció que los grupos informales inician el proceso
en el nivel de las afecciones y los grupos formales requieren del
nivel de aprehensión para pasar al nivel de las afecciones.
El proceso de evolución del nivel de aprehensión al
de afección en los grupos formales fue dinamizado por el
investigador. Queda latente el interrogante sobre si estos grupos
hubiesen trascendido al segundo nivel, sin la catalización
del investigador.
La comunicación informal no solo favorece las relaciones
intersubjetivas sino que también agiliza los procesos de
construcción de sentido y los procesos formales dentro de
la organización.
La metodología aplicada posibilitó la participación
activa de los sujetos de la investigación y de los investigadores.
De esta forma la conversación se convierte en una herramienta
de exploración abierta que se puede sistematizar en los mapas
y, por medio de las lecturas, darle significación.
Este tipo de metodología armoniza las necesidades de la organización
contemporánea con los planteamientos de las nuevas teorías
de la organización y la comunicación en las que todos
los individuos son sujetos de configuración de sentido.
En el estudio se pudo establecer cómo la organización
formal a través de sus estructuras, de los espacios, los
tiempos, los roles y los hábitos de interacción determina
en parte la comunicación informal.
Las organizaciones manifiestan continuamente la necesidad de formar
colaboradores que ejerzan influencia con el ejemplo, que confíen
y sean confiables, que dinamicen el trabajo en equipo con objetivos
comunes, que promuevan la sinergia, el respeto, la valoración
de las diferencias, encauzándolas hacia los fines sociales
de la organización.
En ese modelo de organización que se está planteando,
hay un lugar importante y legítimo para la comunicación
informal ya que, muchas de las características que sugieren
las teorías de la organización, están presentes
en la práctica cotidiana de la comunicación informal.
La organización debe cumplir un papel dinamizador y catalizador
de la comunicación informal que facilite la construcción
de sentido individual y colectivo. El papel no es de gerenciamiento
y control ya que lo desvirtúa como praxis y le haría
perder su esencia cotidiana y espontánea.
La comunicación informal es entonces una comunicación
que le pertenece a la organización, le facilita su cambio,
se gesta en los individuos y le permite la intersubjetividad y la
configuración de sentido para alcanzar el grado más
alto de aprendizaje: el criterio para la acción.
Notas
y refrencia bibliográficas:
1
RESTREPO J., Mariluz. Nuevos modos de comunicación entre
los individuos de la organización. III Simposio Latinoamericano
de Comunicación Organizacional. Santiago de Cali, 8 de mayo
de 1996.
2
LONERGAN B. Citado por Kidder, P. "Lonergan and the Husserlian
problem of trascendental intersubjetivity", Method, Journal
of Lonergan Studies: 4, 1986, 1: 29-54
3
WOLF, Mauro. Sociologías de la vida cotidiana. Cátedras,
1988 p.110
4
GALINDO CÁCERES, Jesús. Apuntes de metodología
en investigación cualitativa. Congreso Latinoamericano de
Investigación Cualitativa. Medellín, 1993 p.55
Olga
Suárez
Fonoaudióloga . Esp. Comunicación
organizacional
Claudia
Ruíz
Comunicadora Social, periodista . Esp.
Comunicación organizacional
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